BORDER: LA CINTA QUE OLFATEARÁ TUS INSTINTOS MÁS FEROCES

Si estás deseoso por ver una película que desafíe a tus instintos con un propuesta fuera de las líneas habituales de Hollywood, entonces aquí tienes “Border” o en su idioma original Gräns, una cinta de director iraní-sueco, Ali Abbasi; quien ganó el premio Un Certain Regard en el festival de Cannes (2018) por ésta película basada en una novela de John Ajvide Lindqvist, autor de otros libros que también fueron llevados a la pantalla grande como “Déjame entrar” y “Descansa en paz”.

Y ya con esa pequeña introducción, vayamos de lleno a lo que nos importa. La cinta es protagonizada por Tina, una agente de aduanas de apariencia e instintos animales que le permiten desarrollarse en su trabajo de una forma muy especial: olfateando el miedo, la vergüenza y la culpa que entran de forma ilegal sin que nadie pueda escapar a su agudo sentido del olfato.

Es así como las primeras escenas nos presentan al personaje de Tina, quien no sólo se ve y tiene el olfato animal, sino que también tiene un contacto especial con la naturaleza que demuestra con sus caminatas descalza por el bosque y esa habilidad de comunicarse a cierto nivel con los animales que la rodean; sin embargo, y como es de esperar, la raza humana a través de la historia ha demostrado un gran rechazo y crueldad hacia lo diferente, es por eso que vemos que la vida de Tina no es más que sobrevivir un día pesado tras otro, todo con una cortina de falsa felicidad y estabilidad al lado de su “pareja”; aunque esos momentos son de inmediato quebrantados por una cámara que da movimientos inestables e iluminaciones azules y solitarias que sólo bañan a Tina en atmósferas densas.

Pero así como en la línea dramática de las historias, como en la realidad: en donde hay oscuridad es porque hay una luz cercana que la proyecta; y esa luz la vemos asomarse cuando el amor inesperado (Vore), llega en un arribo del aeropuerto con el porte animalístico que de inmediato prende un sensor instintivo en Tina, creando un momento de tensión y atracción donde el sonido se hace intenso dejándonos escuchar de cerca las olfateadas que se dan el uno al otro como un acto de apareamiento a punto de concebirse, pero que es ahuyentado por la incertidumbre y el desconocimiento.

Sin embargo, ese primer encuentro está a punto de cambiar toda la vida de Tina, quien ha experimentado el reconcomiendo de algo suyo, como de alguien de su misma especie donde puede encontrar respuestas sobre sí misma, e incluso algo más, es como una especie de empatía fuera del alcance de cualquier otro y que causa un conflicto interno en Tina, quien recurre a otro personaje interesante: La naturaleza, quien reconforta a Tina como el regazo de una madre en la que necesita reposar y encontrar un punto de equilibrio para después poder ir por más.

Así que, tras tantear un poco el terreno, Tina ofrece un refugio a Vore, llevándonos a una escena donde ambos comparten una noche lluviosa llena de truenos que los hacen estremecerse de miedo, tanto que se ocultan bajo una mesa como dos atractivos objetivos para los rayos eléctricos e imponentes que bajan desde le cielo (un misterio del que no te haremos spoiler); éste sin duda es uno de los momentos más íntimos que marca el siguiente paso de la relación: un feroz encuentro en medio del bosque con rugidos, salivaciones y el descubrimiento de un miembro sexual que Tina ignoraba en su propio cuerpo; todo frente a una cámara excitada con libres movimientos voyeristas para que el espectador no pueda apartar la vista ni un segundo.

Seguro ya lo habrás adivinado, pero éste resulta ser uno de los momentos no sólo más excitantes de la película, sino el momento en el que se revela la pregunta silenciosa que persiguió de forma inconsciente a Tina durante toda su vida: ¿Quién soy?

Después de esa sensible escena todo parece ir bien en un desarrollo de búsqueda y encuentros con Vore; pero un episodio nocturno revela que hay algo más que la película quiere ofrecernos, un secreto, un algo que va más allá de apariencias e instintos animales; y pronto las imágenes comienzan a perturbarnos desde dos frentes, por un lado las atrocidades del humano con el caso al que Tina está ayudando con su olfato para encontrar a los responsables de una red de pornografía infantil; y por el otro lado, ese algo inquietante acerca de Vore, algo que parece estarse engendrando en la nevera al frío de una vieja cuenta por saldar.

Y si ya te he logrado emocionar e intrigar con ésta la película, déjame decirte que aún no te he hecho un spoiler importante, ni te he revelado lo más importante de la cinta; de hecho, te prometo que tampoco es lo más impactante, ya que aún te faltan muchas escenas y una historia que descubrir que lograrán ponerte en shock y te dejarán un interesante sabor de boca entre gusanos y otras cosas más…